Hace dias, tuve la suerte de encontrar un libro titulado The Introvert Advantage: How to Thrive in an Extrovert World ( La Ventaja del Introvertido: Cómo prosperar en un mundo de extrovertidos), escrito por Marti Laney, Psy.D. Este libro mas bien parece ser una enciclopedia sobre una rara raza de gente a la que creo que pertenezco y no lo sabia. No sólo me ha explicado muchas de mis excentricidades sino que tambien me ha ayudado a redefinir toda mi vida en un contexto nuevo y mas positivo.
Un amigo me pregunto: "¿Y por qué te llevó tanto tiempo para darte cuenta que eres un introvertido?" La verdad es que no es tan sencillo. El problema es que el etiquetar a alguien como un introvertido podría ser el resultado de una evaluación muy superficial y llena de mitos. El decir que alguien es -o que uno mismo lo es- introvertido es más complejo de lo que se cree.
En una sección del libro -donde comenta sobre los mapas de cerebro humano- explica cómo los neuro-transmisores de los introvertidos y extrovertidos siguen diferentes caminos dominantes en el sistema nervioso. Si la ciencia detrás del libro es correcta -y no dudo que asi sea pues la autora es una eminencia reconocida sobre el tema- resulta que los Introvertidos son personas hipersensible para generar la dopamina, al grado que ante la estimulación externa generan sobre dosis y se les agota. Por el contrario, los extrovertidos no pueden obtener suficiente dopamina, y requieren de la adrenalina que sus cerebros fabrican.
Lamentablemente, según el libro, sólo un 25% de las personas son (o somos?) introvertidos. Incluso los casos extremos son mucho menos de lo que la gente cree. Esta limitante genera un montón de malentendidos, ya que la sociedad no tiene mucha experiencia con personas como nosotros.
Así que para disipar dudas, aquí les dejo algunos mitos sobre los Introvertidos, los cuales, seguramente, algunos de ellos son cosas que realmente usted creía:
